CONACASTE
CONACASTE. La muerte de un árbol gigante. Todo listo para el sacrificio de un inmenso conacaste. Alfredo, mi padre ordena la masacre vegetal. Yo kike, niño de kínder observa los brazos – ramas- caídos en el suelo con curiosidad y asombro, veo. ¿Por qué los brazos en el suelo? … Es la sobrecarga del árbol. Sus brazos – ramas- caen hasta el suelo. Lingas, Lingas son lazos gruesos de henequén para colgar las ramas cuando los trozan, cortan -. Lazos, cebaderas, tecomates amarrados con pitas de henequén; todos estos implementos bajo la sombra del árbol. Los aserradores listos con todo. El árbol lo vendió mi padre en cincuenta colones. Servirá el dinero para sacar adelante la familia del telegrafista de San Pedro Nonualco. Yo el número 13 de los hijos de mi padre. Llegue raspado en 1950. El último. La raspadura de la hoya, el rey del hogar, me decían. Don Miguel Morales, colono administrador de la finca de 20 manzanas observa complacido. Alfredo lleva un adelanto – Diner...
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